Entrevista al artista español con motivo de las presentaciones que tuvo en México los días 5, 6 y 8 de octubre del 2016 en el Auditorio Nacional. Publicada originalmente en el periódico El Economista. Ésta es la versión del autor.
Carlos Sadness me advierte que, si de pronto lo percibo como un poco “viajado”, es porque está viendo por la ventana a la Ciudad de México… y lo impresiona: “No es del mismo tamaño que Barcelona”, comenta.
El asombro de lo cotidiano es lo que inspira a este artista español para sus composiciones. Desde una conversación de WhatsApp: “De una frase construyes un estribillo, lo que ves se convierte en canciones usando la metáfora y la música. La inspiración al final es para mí algo que no puedes ir a buscar”, cuenta el compositor español.
Pero ¿quién es Carlos Sadness? Un cantante e ilustrador nacido en Barcelona, cuyo éxito musical se basa en la conexión con la gente y no en la decisión de una disquera o una estación de radio.
Para él, su éxito es un reflejo de que lo que existe en Internet puede suceder en la realidad . Su nombre artístico, Sadness, es la firma con la que presentaba sus dibujos y está inspirado en los Smashing Pumpkins.
Si bien Sadness utilizó las herramientas tecnológicas a disposición de todo mundo, sabe que no se trata de un golpe de suerte: “Al final, lo esencial es la creatividad. Más allá de la ejecución musical o de qué es lo que está mejor pintado o mejor tocado, lo importante es la idea.
“Nunca me he sentado y he dicho: quiero que las consecuencias lleguen en forma de éxito y de conciertos o festivales. No hay que obsesionarse con conseguir metas, no digo que no hay que tener sueños, sino que sea algo que te sorprenda y que vaya fluyendo (…) La música necesita naturalidad. Uno no puede pensar que debe seguir un modelo. Es ser uno mismo, con naturalidad. Y tu personalidad le va a gustar a la gente.
“Cualquier persona que tenga algo talentoso tiene la oportunidad de exponerlo y de que la gente lo reciba libre, sin depender de nadie. Hemos conseguido cosas a partir en promoción sin contar nada. Cada artista debe encontrar su identidad y que esa identidad conecte con la gente”, argumenta .
Sadness estudió publicidad. Subir canciones era un pasatiempo que luego se convirtió en su actividad principal gracias a herramientas de Internet, entre ellas las redes sociales: “Las redes tienen una función diferente. Por ejemplo, Instagram me ayuda a enseñar la vida musical, las ciudades, los conciertos. Luego, Facebook sirve para colgar videos y nos descubra y nos comparta. Y Twitter nos ayuda a hablar de fechas de conciertos.
“Uno no puede desaparecer un mes. Sino la gente se olvida de que uno existe. Y uno debe procurar aportar buen contenido. No sirve que saquemos un disco cada dos años o tres años. Hay que alimentar la redes mes con mes”, concluye.
Sadness publicará un libro de ilustraciones llamado Anatomía ?Íntima en noviembre. Y es que el cantante dibuja desde pequeño. El libro, dice, es como si fuera un disco porque tiene textos que no tienen un hilo conductor y que pudieran convertirse en canciones pero en vez de música hay imágenes.
El cantante se presentará los días 5, 6 y 8 de octubre en el Lunario del Auditorio Nacional, con localidades agotadas, y no tuvo que gastar 1 peso en promoción: vino porque la gente de México lo pedía en sus redes sociales.